el soporte

De la pared a la tabla, y de la tabla a la tela. Quizás esa fue la secuencia en la que el uso del soporte utilizado fue variando por la mayoría de los pintores, a través de la historia. Y a cada tipo de superficie se le hizo necesario una manera previa de puesta a punto.

La preparación de la superficie donde se va a pintar, tiene al menos dos funciones. Una de ellas es favorecer el agarre de la pintura en la superficie, además permitir el desplazamiento cómodo de la pintura que se extiende durante el trabajo, la otra finalidad de esa preparación es asegurar la durabilidad del resultado. La tarea de preparación de la superficie o soporte a pintar, se llama imprimación.

En este taller (sin desmerecer o perder de vista la durabilidad del trabajo, aunque dejando ese aspecto en un segundo orden) nos debemos interesar especialmente por una imprimación que facilite el ejercicio de la pintura, que el pincel circule de una forma mas o menos fluida. Incluso la idea de trabajar sobre lienzo es considerada como, en cierta medida, inapropiada para una etapa de estudio como propongo.

Entonces, ¿cuál es mi idea en relación a los elementos de trabajo? Está en las bases del funcionamiento de este taller, el hecho de que el peso del trabajo abundante ofrece la verdadera experiencia necesaria para ser un futuro artista. Es decir, cada planteo, cada pensamiento o idea que efectivamente se trasmita, se plasme, se pinte o se dibuje, es una nueva experiencia, un nuevo paso, otro peldaño, que permite un cierto apercibimiento de seguridad y claridad de trasmisión de las ideas. Aquí, trabajar es un ejercicio.

Preguntas y respuestas y nuevas preguntas se deben suceder, y ese desorden termina por asentarse en la facilidad de resolución que se obtiene, justamente, por la experiencia efectiva de trabajo. No por lo que se aprende en los libros, sino por la intuición y el oficio que precisamente se consigue con la práctica. En ese orden de necesidad, y de autoformación, influyen los materiales. Trabajar con materiales de gran calidad es decir trabajar con materiales “profesionales” aparentemente facilitaría el asunto, pero por mi experiencia, el efecto es justamente el inverso. Entregar el mejor lienzo de lino, los óleos y trementinas más depuradas, y perfectos pinceles nuevos a un inexperto, no es ayudarlo. Es impresionarlo, es intimidarlo, es maniatarlo. Sin duda querrá aprovechar todo ese equipo para hacer una “obra maestra” y pondrá en juego todos y cada uno de sus prejuicios y temores con la finalidad de no defraudar ni defraudarse. Y además, mientras trabaje estará consciente de que ese trabajo debe “justificar” el dinero invertido en esos materiales.

Por eso propongo trabajar con materiales baratos. Óleos baratos y acrílicos industriales. Propongo pintar sobre cartones, sobre el papel llamado misionero o sobre superficies más rígidas como terciados, o fibro fácil.

PREPARACIÓN SUGERIDA.

Básico. Una mano a pincel o rodillo de cola sintética blanca (conocida como cola sintética de carpintero) rebajada al 50% con agua. Y una segunda mano a pincel o rodillo con la misma cola pero con menos agua... con una densidad de miel algo líquida.

Menos básico. Una tercera mano con el agregado de un poco de latex blanco, para que finalmente quede un fondo claro.

Más sofisticado. Una tercera mano con el agregado de látex, o pigmentos de colores en polvo, o “cargas” para darle mas porosidad a la terminación. Las cargas pueden variar desde la arena, aserrín o tiza en polvo.

Esta preparación o imprimación se puede efectuar prácticamente sobre cualquier superficie (menos plásticos, sintéticos o metales).

La imprimación de soportes es una tarea rutinaria y aburrida, que requiere además de un par de días para lograr buenos secados entre capas o manos, por lo que creo conveniente hacerlo fuera del taller, de manera que aquí se use el tiempo en prácticas más interesantes.

En el caso de papel misionero o papel de escenografía o cartones, es mejor (si se dispone de suficiente lugar) prepararlo sin cortar, para fraccionarlo luego.

Por último, si alguien decide escribir en Google “preparación de superficies para la pintura artística”, "imprimaciones para la pintura artística" o una solicitud de este estilo, seguramente aparecerán algunas recetas más elaboradas con ingredientes más específicos (esto significa menos fáciles de encontrar) que por supuesto también funcionan, y que además suelen ser una solución más cara.

En todo caso, a los puntillosos e inseguros, les recomiendo un libro específico y a la vez tranquilamente innecesario: GUIA COMPLETA DE PINTURA Y DIBUJO / Técnica y Materiales de Colin Hayes. Hermann Blume Ediciones.

1 comentario:

  1. Julio: la cola sintetica de carpintero se puede mezclar con un color (oleo) para que el fondo ya quede de un colo y no blanco? o conviene hacerlo despues el en segundo paso con un latex de color? Virginia

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